Dentro del mundo gastronómico, especialmente en el repostero, la harina es ese ingrediente que no puede faltar en la cocina. Muchas son las recetas al rededor del mundo que tienen de base este alimento rico y nutritivo con el que se pueden crear diversos platillos. Sin embargo, en los últimos años han surgido diferentes tipos de harina que se han expandido por diversas regiones, sorprendiendo a todos por su variedad de sabores, texturas y elaboraciones. ¿Te gustaría saber más de estas harinas para enriquecer tus platos? Toma nota de nuestro blog o aprende de manera profesional con nuestro Máster en Pastelería.
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¿Cuántos tipos de harina existen?
Una harina es el resultado de la molienda fina de un cereal, semilla, fruto seco, legumbre, y de insectos. Aunque en ciertas partes del planeta se consume la harina de cereales como el maíz o el centeno, el trigo es todavía el más extendido y habitual en la mayoría de cocinas. Pero, poco a poco, otros tipos de harina han ganado terreno en las recetas tradicionales por su matiz y nivel nutricional. A continuación, te explicamos cómo se clasifican las harinas que debes probar alguna vez en la vida.
Harinas de cereales
Las harinas de cereales más comunes son las de centeno, habitual en los panes integrales, y las de trigo. Estas se suelen mezclar porque por separado la de centeno es más amarga y más densa. Además, los panes negros hechos con la harina de centeno son más protagonistas en el norte de Europa, sobre todo de los países escandinavos. Son panes de miga muy densa, muy nutritivos y se conservan bien. Otras harinas de cereales muy utilizadas son:
- Cebada: este cereal también es conocido de los panes integrales y es pobre en gluten, por lo que al usarlo salen panes más bajos y de miga densa.
- Avena: es un cereal muy típico en los desayunos anglosajones que se consume en papillas o en los porridges. Es muy nutritivo, tiene un sabor suave y es fácil de usar en la elaboración de galletas o magdalenas.
- Arroz: esta harina es muy popular en Asía, ya que la podemos ver en sus fideos, mochis y tempuras. Es muy frecuente en las preparaciones para celiacos, aunque por su poca cantidad de proteína y su alto contenido en almidón, es recomendable para espesar salsas y hacer rebozados.
- Maíz: muy común en la cocina latinoamericana, este cereal se usa para preparar las tortillas mexicanas, las arepas y algunas salsas. También, hay muchas variables de esta harina según su proceso de elaboración, como la maicena.
Tipos de harina de pseudocereal
Un tipo de harina de pseudocereal muy usado en diferentes partes de Asia y en algunos países del este de Europa es la harina de sarraceno. Esta semilla milenaria tiene grandes propiedades nutricionales y se usa para hacer fideos japoneses, el pan nan de la India o las galettes bretonas. Además de esta, existen otras harinas que no son de cereal y son muy usadas, como:
- Harina de quinoa: este pesudocereal se ha extendido a diferentes países desde Perú por sus propiedades nutricionales y su alto contenido de proteína. Se puede utilizar para todo tipo de comidas, pero, al no tener gluten, no tiene mucha elasticidad.
- Garbanzo hecho harina: este es uno de los tipos de harina más usados en la Inda, en el resto del mundo es poco frecuente en panes, aunque ya es tendencia en la repostería saludable y en la nutrición deportiva por su gran contenido de proteína.
- Guisantes: esta harina parece estar cogiendo fuerza en la industria alimentaria por su valor nutricional al tener mucha proteína y poco gluten.
- Almendras: la harina que no contiene nada de cereales es del fruto seco que más aporta minerales, vitaminas y antioxidantes. Es una opción muy nutritiva para elaborar panes dulces, aunque es mucho más cara.